La víctima tiene 11 años y su padrastro es el posible abusador.
Castelli está conmocionada por un posible caso de abuso de una niña de la etnia Wichí de 11 años. La fiscalía penal de esta localidad tomó intervención en el caso luego de que el 5 de diciembre, la directora del hospital de Miraflores, presentara una denuncia.
La directora del hospital de Miraflores, Evelin Pittau, de acuerdo a la denuncia, tomó conocimiento del hecho el 3 de diciembre por intermedio de un agente sanitario, quien recibió la noticia de otro compañero de trabajo.
Entre los datos aportados, esta nena que vive en el Paraje Techat II, podría haber sido abusada por su padrastro, aunque no se conocen las medidas que adoptó la justicia de Castelli ante el presunto abuso y embarazo forzado.
La niña vive en el paraje mencionado, jurisdicción de Miraflores y cursaba un embarazo de 23 semanas al momento en que le brindaron la primera asistencia sanitaria.
La nena luego de ser derivada al hospital, los médicos indicaron medidas de acuerdo al protocolo. Realizaron exámenes que fueron enviados al laboratorio y requirieron la visita de un asistente social al hogar de la víctima.
Los médicos que la atendieron dijeron que “existe una barrera lingüística que está afectando la comunicación no sólo con la nena embarazada, sino también con la madre».
La mamá dijo que “teme por las complicaciones” derivadas de la intervención destinada a interrumpir el embarazo, la cual fue propuesta por los agentes sanitarios. Por esa causa, esta mujer aconsejó a su hija para que siguiera adelante con la gestación y así lo resolvieron.
Las niñas menores de 15 años tienen mayor riesgo de muerte materna, de eclampsia, hemorragia posparto, anemia. También se conoce que los nacidos de madres menores de 15 años presentan mayor probabilidad de tener bajo peso al nacer o ser prematuros o nacer pequeños para su edad gestacional, como también que cursan mayor riesgo de muerte neonatal temprana.
El Ministerio de Salud está evaluando la derivación al Pediátrico en Resistencia para asegurar el programa de controles que la dinámica de la gestación determine, según las complicaciones que vayan surgiendo, que pueden ser cambiantes y que deben ser evaluadas y seguidas por el equipo multidisplinario.
Este caso se suma a los cientos de casos de los recién nacidos en Chaco que tienen de madres menores de 15 años.