Así lo ejemplifica el arzobispo de Resistencia, Ramón Dus, con respecto a las misas públicas en los edificios de las parroquias. Enfatiza la responsabilidad social de la comunidad en este contexto.

Por razones de prevención, las misas abiertas y públicas en los edificios de las iglesias se encuentran suspendidas para evitar las aglomeraciones de personas que en consecuencia implique un riesgo de contagio de coronavirus. En cumplimiento con las medidas gubernamentales, la comunidad católica local llama a fortalecer lazos familiares.

En ese marco, consultado por Radio Provincia, el arzobispo de Resistencia, Ramón Dus, aseguró que la vuelta de las misas públicas, es decir, «la normalización vendrá cuando vuelvan los chicos a las escuelas». En ese marco, Dus aseguró que mantiene contacto con párrocos de otras partes de la provincia, que «tienen una realidad distinta a la de Resistencia».

La concurrencia a la iglesia está restringida a un número controlado de gente y en ocasiones, «algo que viene bien para nuestra situación en la cuidado». «Consultando con nuestro Consejo de Sacerdotes, que me ayudan a ver la realidad y discernir juntos, la normalización de nuestras misas hay que pensarlas cuando nuestros chicos vuelvan a las escuelas, lo que no quiere decir que antes no se pueda hacer algo», aseguró la autoridad católica.

«Ciertamente reuniones masivas no se podrán hacer«, enfatizó, pero aclaró que se encuentran «comprometidos a seguir las disposiciones». Esta pandemia ayuda a «clarificar nuestras responsabilidades, el compromiso del ciudadano. Como dice el Papa Francisco, pasar de ser habitantes a ser ciudadanos, de sentirnos protagonistas».

De esta manera, abogó a «seguir creciendo en la fe, animando al compromiso social», ya que «somos todos responsables».