La jueza dio un paso al costado en la causa que investiga la muerte de su ex esposo, quien fue hallado sin vida en su departamento de Puerto Madero en enero de 2015.
La jueza federal de San Isidro, Sandra Arroyo Salgado, renunció por cuestiones de índole familiar a ser querellante en la investigación por el asesinato de su ex marido y padre de sus dos hijas, el fiscal especial del caso AMIA Alberto Nisman, según un escrito presentado en el juzgado que lleva la causa a cargo de Julián Ercolini, informaron fuentes judiciales.